QUÉ NECIO

Quinientos un fallecimientos nuevos por coronavirus en 24 horas fue ayer el nuevo registro récord dado a conocer por Hugo López Gatell, con la maroma de que buena parte de ese incremento se debe a retrasos por días previos.

El seguirnos mintiendo con descaro, para simular que no vamos tan mal como parece, con posturas oficiales abiertamente contradictorias con el presidente presumiendo que vamos de salida mientras la Secretaría de Salud advierte un muy probable “rebrote” de la pandemia a nivel nacional.

La realidad es que con todo y que siguen manipulando las estadísticas a la baja, los números que les son imposibles de ocultar terminan por aplastar los optimismos y las presunciones oficiales.

Varios gobernadores reclamaron en lo interno que las cifras que ellos reportan de muertes y contagios son notablemente mayores a las que oficialmente se difunden todos los días.

Hay un burdo y criminal ocultamiento, no retraso.

La estrategia de lavarse las manos quedó confirmada ayer con la aseveración del mitómano Gatell de que los estados que más tardarían en regresar a la normalidad son los de Nuevo León y Jalisco, cuyos gobernadores han criticado abiertamente las estrategias federales.

Lo que salga mal será culpa de otros, pero nunca del mesías.

Y en medio de la trágica realidad que rebasa las cuentas alegres del gobierno, Andrés Manuel López Obrador quiere reanudar las giras presidenciales.

Perfectamente enterado está de que la pandemia está pegando muy duro a nivel nacional, pero al presidente la salud y la vida de los mexicanos les importa un soberano sorbete.

Primero él, luego él y al final él.

Quiere darse más baños de pueblo, simulando la sana distancia.

Lo reanudación de las giras presidenciales está en veremos no porque Andrés Manuel dude en hacerlas o no.

El temor principal es el de las inevitables condenas internacionales; por si se decide, ya tienen una lista de gobernadores y alcaldes incondicionales, dispuestos a “demostrar” que la nueva normalidad es un hecho y no la faramalla acusada por los adversarios.

QUÉDATE EN CASA

La inevitable conclusión frente al gobierno chimoltrufio es la de no debemos creer lo que nos dicen.

Hay que quedarnos en casa, y si salir resulta obligación se deben tomar las medidas preventivas que todos conocemos.

Guantes, gel, mascarillas y si es posible caretas; no tocar nuestra cara, y lavado continuo de manos, particularmente en el regreso a nuestra casa.

Testimonios sobrados hay de la facilidad de los contagios y de la elevada letalidad del covid.

Letalidad muy por encima de los registros de la gran mayoría de los países, que puntualicemos se debe a que en México son muy escasos los exámenes clínicos y los positivos confirmados.

No es que mueran aquí más de los contagiados, sino que el número de éstos es mucho menor al real.

Al gobernador Quirino Ordaz Coppel y a nuestros alcaldes, la reiteración de lo que sabemos: siempre vale más prevenir que lamentar.

Entendemos que quieran complacer al presidente en sus simulaciones de que las cosas caminan hacia la normalidad, pero son más importantes la salud y la vida del pueblo. Quédenles claro que muchos sinaloenses no están dispuestos a perdonarles que prefieran quedar bien con ya saben quién, y que dejen para después las obligaciones y responsabilidades que tienen con sus gobernados.

Por Juan Manuel Partida Valdez